David de El Silo de hortaleza

Producción El Silo de Hortaleza

DAVID

Hortaleño de cuna. Algunos le conoceríais patinando en el barrio. Dice que dejó el skate por la edad pero sigue disfrutando de cualquier deporte, que ahora combina con su pasión por la cerveza. Si necesitáis algo, acudid a él: Es vuestro hombre. Es un alma generosa: acogió en su casa el embrión de El SILO. Lo cuidó y lo hizo crecer y, por eso, el resultado no os va a dejar indiferentes. El cariño y el trabajo que ha puesto se ven reflejados en EL SILO y en su personalidad. Sin él, nada habría sido igual. Los que le conocéis, lo sabéis.

DANI

Como dice que de hacer cerveza se ocupa la levadura, nosotros le llamamos nuestro cocinero de mostos. Es tan de Hortaleza como EL SILO (aunque, considerablemente, más joven)  Si sale del barrio le entra morriña hortaleña y tiene que volverse rápido. Seguro que os lo habéis encontrado más de una vez. Incluso habréis estado en algún concierto suyo en las fiestas. Desde hace un año y medio ha estado obsesionado con la fórmula para que podáis tomaros una cerveza diferente, que nos representara y que os gustara. EL SILO le debe su sabor único.

JAVIER

Fue aceptado en Hortaleza, lo que dice mucho de David, Dani y del barrio. Se sintió uno más porque los de Hortaleza nacen donde quieren. Fue el mayor de los tres aunque no presumía de ello (tampoco nadie se atrevió a mencionarlo). Leía todo lo que pillaba y escuchaba música rara. Y lo más importante, su palabra era siempre ley. Pensaba que EL SILO era un gran equipo y que el resultado, forzosamente, tenía que ser bueno. Para él, la cerveza de barrio, era y es, por fin, una realidad. Si tuvisteis suerte de conocerlo, seréis muy afortunados.

LA IDEA

La idea surge en un bar del barrio, plasmando la idea en una de sus servilletas. La falta de una cerveza artesana de referencia en el barrio y nuestra pasión por hacerla fue la combinación perfecta, pero tenía que haber algo más.
Si el proyecto funcionaba sería por su gente, así que había que buscar la forma de agradecerlo. Y qué mejor manera de compensar ese apoyo que contando con la propia gente del barrio para nuestro crecimiento.
El compromiso de El Silo de Hortaleza es crecer, siempre que existan los medios y sean proporcionales, con la gente del barrio.
Si necesitamos contratar a alguien más para que nos ayude a llevar a cabo el proyecto, intentaremos que sea un vecino. Si necesitamos un servicio profesional para satisfacer alguna de las múltiples necesidades que tenemos, lo buscaremos primero en el barrio.
En la sección Colaboradores, podéis ver que todo lo que ha sido posible se ha contratado en el barrio. Agradecemos la ayuda de todos.